Nos encontramos en Pest, la parte más llana de la ciudad, en un entorno protegido muy cerca del Parlamento. Por ello, pese a que el interés histórico real del edificio es deficiente, se trata de un edificio cuya fachada está protegida. Ello implica que todos los huecos actuales nos limitarán y condicionarán la distribución interior.

Se plantea por tanto una restauración total de la fachada eliminando todos los impactos negativos que ha ido adquiriendo el edificio con el paso del tiempo. Restauración de las carpinterías existentes en buen estado y sustititución de aquellas que no pueden ser recuperadas. En planta baja se mantienen los accesos actuales al edificio, siendo el principal el de la Calle Luna, mientras que los demás serán un acceso directo al restaurante desde la vía pública, acceso al parking y salidas de emergencia.

La normativa zonal permitía utilizar el espacio de la cubierta como espacio habitable. Teniendo en cuenta las inclinaciones de las cubiertas en Budapest esto nos permitía sustituir la cubierta actual por otra ganando dos plantas más al edificio, que se van retranqueando para que la volumetría del edificio no se viera alterada. Además, se añadían balcones abiertos en ciertas partes de la cubierta a modo de terrazas de las habitaciones.

El acceso principal al edificio se mantiene como entrada principal del hotel, marcando el eje que forma con el patio, desarrollando todo el programa del lobby alrededor del mismo. Se añade una gran marquesina colgada, devolviendo así la entrada a su estado original, ya que ésta se ha perdido con el tiempo.