© Miguel Santesmases
El antiguo Hotel Asturias está situado en el centro de Madrid, consta de dos edificios catalogados, uno de ellos con protección estructural y el otro con protección integral. El estado en el que se encontraba el edificio al hacernos cargo de él hacía necesaria una rápida intervención. Se realizaron obras de restauración, conservación, rehabilitación y consolidación estructural.
Al desmontar acabados y tabiquerías interiores se identifican daños considerables en la estructura que es de pilares de fundición y pies derechos en plantas baja y primera y muros de entramado desde planta segunda. Los forjados, de vigueta metálica de ala estrecha y revoltón.
Junto con los equipos de Áliva y Proskene se identifican los elementos dañados uno a uno. Se refuerzan las carreras de madera y sustituyeron los pies derechos en mal estado. En aquellos pies derechos en los que la pudrición no se extiende por toda su altura, se sustituyen las partes dañadas por prótesis de madera.
© Miguel Santesmases
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La cubierta de uno de los edificios, de teja, se rehabilita completamente. Se desmontan y recuperan las tejas originales que estaban en buen estado para emplearlas como canales, finalmente el material recuperado es tanto que se puede reutilizar también como cobijas.
La fachada es de mampostería de granito en plantas baja y primera y ladrillo a partir de planta segunda. Durante la rehabilitación, se limpian de cuerpos extraños y reconstruyen las impostas de balcones deterioradas, se recuperan las impermeabilizaciones de zinc en los miradores y se limpian las rejas de forja añadiendo un tramo con el mismo diseño para cumplir la altura mínima marcada por el código técnico.
La escalera principal había cedido debido a los colapsos del patio adyacente y el mal estado general de la estructura. Se recupera el ojo de escalera original desmontando un ascensor sin ningún valor que se había añadido durante los años 70. Los peldaños de cada tramo de escalera se nivelan uno a uno añadiendo las prótesis de madera necesarias para corregir el desplome e igualar las tabicas.
© Miguel Santesmases
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Se eliminan las capas de pinturas aplicadas sobre los sofitos de la escalera hasta recuperar la madera. Se limpian y lijan los balaustres que vuelven a tener la riqueza de formas original.
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El antiguo Hotel Asturias está situado en el centro de Madrid, consta de dos edificios catalogados, uno de ellos con protección estructural y el otro con protección integral. El estado en el que se encontraba el edificio al hacernos cargo de él hacía necesaria una rápida intervención. Se realizaron obras de restauración, conservación, rehabilitación y consolidación estructural.
Al desmontar acabados y tabiquerías interiores se identifican daños considerables en la estructura que es de pilares de fundición y pies derechos en plantas baja y primera y muros de entramado desde planta segunda. Los forjados, de vigueta metálica de ala estrecha y revoltón.
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Junto con los equipos de Áliva y Proskene se identifican los elementos dañados uno a uno. Se refuerzan las carreras de madera y sustituyeron los pies derechos en mal estado. En aquellos pies derechos en los que la pudrición no se extiende por toda su altura, se sustituyen las partes dañadas por prótesis de madera.
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La cubierta de uno de los edificios, de teja, se rehabilita completamente. Se desmontan y recuperan las tejas originales que estaban en buen estado para emplearlas como canales, finalmente el material recuperado es tanto que se puede reutilizar también como cobijas.
La fachada es de mampostería de granito en plantas baja y primera y ladrillo a partir de planta segunda. Durante la rehabilitación, se limpian de cuerpos extraños y reconstruyen las impostas de balcones deterioradas, se recuperan las impermeabilizaciones de zinc en los miradores y se limpian las rejas de forja añadiendo un tramo con el mismo diseño para cumplir la altura mínima marcada por el código técnico.
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La escalera principal había cedido debido a los colapsos del patio adyacente y el mal estado general de la estructura. Se recupera el ojo de escalera original desmontando un ascensor sin ningún valor que se había añadido durante los años 70. Los peldaños de cada tramo de escalera se nivelan uno a uno añadiendo las prótesis de madera necesarias para corregir el desplome e igualar las tabicas.
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Se eliminan las capas de pinturas aplicadas sobre los sofitos de la escalera hasta recuperar la madera. Se limpian y lijan los balaustres que vuelven a tener la riqueza de formas original.